miércoles, 13 de enero de 2010

EL PROGRAMA DE VERANO DE 1ROBOTCIEGO


Escuchamos voz de presentador solemne, que en tono arengador insta a la tribuna a ponerse de pie y a alabar con aplausos y vítores, la llegada una hora tarde a su propio programa del presentador:

¡MUY BIENVENIDOS SEAN UNA VEZ MÁS AL PRIMER PROGRAMA DE VERANO DE LA TEMPORADA. CON TODA LA MEJOR ONDA DE SIEMPRE, ARRANCA UNA VEZ MÁS EL PROGRAMA DE VERANO DE 1ROBOTCIEGO, QUE INICIA POR PRIMERA VEZZZ… ASÍ: MÚSICA MAESTRO!.

La idea era que suene The Cure o algún grupito emo de esos de ahora. Pero estrepitosamente, el clima cambió a una guarania de Cayo Sila Godoy. La productora le gritó a las bailarinas “¡AHORAHORA!” y un club de divorciadas cuarentonas con buenas tetas, aparecieron vestidas de chiperitas (el boom del momento), contorneándose radical y absolutamente al compás de otro ritmo que nada que ver con el que el maestro desenvainaba de sus cuerdas. 1ROBOTCIEGO ingresó al plató, efectivamente 60 minutos después de lo pautado, guiado por su fiel escudero Canino el Caniche. Que en realidad no era un caniche, pero ojos que no ven……

El can sabía que nuevamente nada estaba guionado aquella noche, como en otras tantas que nunca sucedieron. Así que ideó un procedimiento, para salvarguardar la situación. Y con un ladrido silencioso le ordenó al “dijey” un decisivo scratch, que cortara el otrora hit favorito de los panelistas. Cual reflejo de arquero de la reserva, con ganas de que el titular se lesione la próstata, el “disc-jockey” asimiló la orden y buscó entre su repertorio algo más “moderno”. Pero lo único que encontró a mano fue un cassette virgen, cuya cinta rayada había sido utilizada por Canino para asearse entre los dientes, a falta de hilo para flecha.

Ya perdiéndose todas las esperanzas de impedir el gigantesco bache, que se auguraba para la emisión estreno del show con más auspiciantes del ciclo televisivo anual, una tostadora en forma de i-pod touch solucionó el problema, reproduciendo un repetitivo “PILAPILAPILAPILAPILAPILAPILAPILAPILA!!!!!”, hasta infestar los tímpanos de la platea.

En eso, un confuso ex soldadito de la Armada, que justo pegó una changuita en el área de “Marketing” o “Promociones” o “Venta” o “Imagen Institucional” o “Nuncasupobienloquefirmó” pero fue contratado para ser el Muñeco-de-la-Pila-que-sale-en-la-tele, por el negocio de pilas que manejaba su tía, se avivó e hizo su debut en pantalla, antes incluso de que intervenga el mismísimo protagonista.

Bajo las miradas atónitas de los camarógrafos y varios de la farándula que habían sido invitados, el vapor que acumulaba en el interior de su traje, sumado a un compuesto químico que los fabricantes le habían colocado al disfraz para que luciera más “real”, comenzaron a hacer efecto y le provocaron un pánico escénico, que arruinó por completo lo que pudo ser su lanzamiento al estrellato. Y sólo se limitó a decir ante cámaras:

“HOLA BUENA NOCHE. ASÍ COMO DIJO EL SEÑOR DE LA NOTICIA… HACE CAAAAAALOOOOOOOOOOOOOR CUATE. POR ESO, PIDA PILA NDROIDE!. LA MEJOR PILA PARA TU ROBOT…”.

A estas alturas, el director ya había perdido la cordura, debido a que almorzó un zapallo fermentado por los 46º que hicieron literalmente bolsa, la bolsa en la que trajo sus tuppers con la comida preparada por su santa madre. Y en un arranque de inestabilidad emocional, apretó unos ocho botones en simultáneo, que mandaron al aire una nota pensada recién para el tercer bloque de la novena temporada. Pero que ya se había grabado por las dudas, porque “la idea estaba buena”.

El público en sus casas no entendía nada. La transmisión en horario premium del canal con mayor rating y penetración en hogares, más penetrante incluso que las pornos con las que competía en esa franja, se estaba yendo al carajo. Miles de llamados comenzaron a aturdir las oficinas de la estación y el control central.

Sin embargo en la interferencia, un videotape mostró al perro como un desenvuelto movilero. Todos se quedaron desconcertados. No porque el animal hablara, sino porque tenían que pagarle al que le enseñó a coordinar más o menos dos o tres frasecitas en perfecto castellano.

Canino el Caniche obtuvo toda la atención, cuando presentó la entrevista:

“HOLA QUE TAL, DESDE EL TRÓPICO DE CÁNCER SOY CANINO EL CANICHE, TRAYÉNDOTE TODA LA ONDA DEL VERANO. HOY ACÁ DESDE LA PLAYA XIKITUFIRALCSKALAPATEPEC, VAMOS A APRENDER CÓMO HAMACARNOS SIN IMPULSARNOS CON LAS PIERNAS. ESTAMOS EN COMPAÑÍA DE MI AMIGO PERSONAL CASTOR PIZZOLA. CONTANOS CASTOR ¿CÓMO PODEMOS DISFRUTAR AHORA QUE SE VIENE EL CALORCITO, DE UNA BUENA HAMACADA SIN APOYAR LOS PIES EN LA ARENA, PARA EVITAR INFECTARNOS DE ALGUNA ALIMAÑA QUE CIRCUNDE POR EL LAGO?”.

Un zoom-in enfocó directamente a un mono manco, también sobrino adoptivo de la dueña del emporio de las pilas, quien por culpa de las constantes intervenciones de Greenpeace y otras organizaciones progresistas en pro de la protección de la fauna, había perdido el empleo en el que se ganaba la vida, ofreciéndose como objeto de experimentos con fines farmacológicos. Y que a falta de un trabajo más consistente, se presentó al casting y fue elegido entre los más de 12.000 aspirantes (todos simios, pero humanos), para ilustrar lo que sea de lo que hablen los materiales enlatados.

El primate miró a la lente con unas ganas de estar en un templo shaolín con doncellas orientales, que le practiquen el tomo 2 del kamasutra 3D o por lo menos enseñándole a jugar sudoku. Pero esto era imposible. Y con el semblante agachado, siguió hamacando a Castor, al tiempo que éste respondía a la pregunta del cuadrúpedo lacayo de la figura del programa con un rotundo: “...ASÍ...”.

Fueron al corte, no sin antes anunciar que en este verano, la coencima Q10 está de oferta en la despensa de la esquina. Luego, un hit de Fito Páez, seguido por la misma voz promocional que vende cartones de telebingo, dijo que una vez más: “SE VIENE EL CONCIERTO DEL AÑO!!!”, como si hiciera falta que vuelva.

Todos los televidentes hicieron zapping al instante. Pero Canino, con afanes de ser el primero en los créditos finales, por telekinesis disparó una orden digital hacia el inconsciente de todos, lo que provocó que los más pudientes buscaran automáticamente “Compay Segundo” en Youtube. Ante tantas solicitudes, el servidor no dio abasto, y al colapsar, redirigió los pedidos a una balada horrible de los Ting Tings.

La gente se “rascó” las vestiduras. Y esa noche se reportó a nivel mundial la peor catástrofe de crímenes por impacto de laptops en la tras nuca, arrojadas por usuarios que sudaban una sustancia viscosa verde.

Igual como no había otra cosa para ver, la audiencia volvió al canal donde pasaban el programita del Robot Ciego. La celebridad que daba nombre al proyecto, todavía no aparecía. Algunos dicen que lo vieron perdido entre la escenografía. Mientras tanto, Canino, para honrar la fama de su amo, enseñaba en un informe de exteriores, cómo preparar un sándwich de huevo y cebolla y jamón y queso haciendo snowboard y logrando levantarse a una promotora, en vivo y en directo, antes de ponerle mayonesa.

¡Qué maestro!.

(continuará)